Sindrome de la Cintilla o Banda lliotibial

La banda o cintilla iliotibial es la condensación de la fascia formada por el músculo tensor de la fascia lata y el glúteo mayor. La banda iliotibial es una gran estructura plana que se origina en la cresta ilíaca y se inserta en el aspecto lateral de la tibia proximal concretamente en el tubérculo Gerdy (imagen). La banda funciona como un ligamento lateral entre el cóndilo femoral lateral y la tibia en la estabilización de la rodilla. La banda iliotibial asiste en 4 movimientos de las extremidades inferiores.

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-Contribuye a la rotación interna de la cadera cuando la articulación de la cadera es flexionada a 30 °.
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Ayuda con la extensión de la rodilla cuando la rodilla está en menos de 30° de flexión.
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Ayuda con flexión de la rodilla cuando la rodilla se encuentra en más de 30 º de flexión.
La banda iliotibial no está sujeta al hueso, en el trayecto entre el tubérculo Gerdy y el epicóndilo femoral lateral. Esta falta de apego le permite moverse anterior y posteriormente con flexión y extensión de la rodilla. Una hipótesis es que este movimiento puede provocar que la banda friccione contra el cóndilo femoral lateral causando inflamación.  
Hay una bolsa que se encuentra localizada debajo de la banda iliotibial que se extiende desde el epicóndilo lateral del fémur hasta el tubérculo Gerdy. Esta bolsa se inflama y causa una sensación de chasquidos o crepitación en los movimientos de flexo-extensión de la rodilla. La bolsa inflamada puede añadir otro componente a la tendinitis de la banda iliotibial. 
 
Biomecánica específica de cada deporte 
En los corredores, el borde posterior de la banda iliotibial choca contra el epicóndilo lateral del fémur justo después de que el pie golpea en el ciclo de la marcha. Esta fricción se produce en o ligeramente por debajo de los 30 ° de flexión de la rodilla. Al correr cuesta abaja o al correr con velocidad más lenta pueden exacerbar el síndrome de la banda iliotibial ya que la rodilla tiende a flexionarse menos en el golpe del pie.  
En los ciclistas, la banda iliotibial se desliza anteriormente cuando se pedalea a hacia abajo y posteriormente cuando se pedalea hacia arriba. La banda iliotibial está predispuesta a la fricción, irritación, y microtraumas durante este movimiento repetitivo, ya que sus fibras posteriores se adhieren estrechamente al epicóndilo femoral lateral. 
 
Causas
 
El síndrome de la banda iliotibial es el resultado de la inflamación e irritación de la porción distal del tendón iliotibial, ya que frota contra el cóndilo femoral lateral, o menos comúnmente, la tuberosidad mayor. Esta lesión por sobreuso repetitivo ocurre con la flexión y extensión de la rodilla. La inflamación e irritación de la banda iliotibial, también puede ocurrir por falta de flexibilidad de la banda iliotibial, que puede resultar en un aumento de la tensión de la misma en la fase de apoyo de la carrera.  
Este frotamiento excesivo  puede irritar el tendón en sí mismo y/o el tejido blando subyacente. 
 
 
Ciclistas
 
 
  • Los ciclistas pueden sufrir un síndrome de la banda iliotibial debido al posicionamiento sobre la bicicleta. La excesiva rotación interna o medial de los fiadores  de la bicicleta y un asiento demasiado alto son las 2 causas principales del síndrome de la banda iliotibial de los ciclistas.
 
  • Los ciclistas con rotación  externa de la tibia proximal superior a 20°: El estrés se crea en la banda iliotibial, si el ciclista coloca los zapatos mirando hacia delante.
 
 
  • El ciclista con alineación en varo de la rodilla o pronación activa provoca en el tramo más distal de la banda iliotibial un mayor estiramiento cuando monta, con rotación interna del fiador.
 
 
  • Mala adaptación del sillín de la bicicleta: Una sillín demasiado alto hace que el ciclista tenga que extender la rodilla más de 150°. Esta extensión exagerada de la rodilla causas la parte distal de la banda iliotibial roce en el cóndilo femoral lateral. Los Sillines de bicicletas que se coloca demasiado lejos hacia atrás provocan que al ciclista le cuesta llegar al pedal con el consiguiente estiramiento de la banda iliotibial.
 
Corredores
 
  • El borde posterior de la banda iliotibial choca en contra el epicóndilo lateral del fémur justo después de que el pie golpee en el suelo durante el ciclo de la marcha. Esta fricción se produce en o ligeramente por debajo de 30 ° de flexión de la rodilla. El correr cuesta abajo o el correr a velocidades más lentas pueden exacerbar el síndrome de la banda iliotibial ya que la rodilla tiende a estar menos flexionada cuando el pie golpea el suelo.
 
  • Correr sobre superficies duras y superficies inclinadas: La pierna lesionada a menudo es la que está en la parte más baja, de la pista.
 
  • zapatillas desgastadas o inadecuadas.
 
  • las extremidades inferiores y pie de desalineación - valgus o varus alineación de la pierna o pierna discrepancia de longitud.
 
  • Los corredores de larga distancia de tienen una mayor incidencia de síndrome de la banda iliotibial que los de corta distancia y los velocistas. Esta mayor incidencia puede deberse a cambios en la biomecánica de la carrera frente al Sprint. La debilidad de los grupos musculares en la cadena cinética también puede dar lugar a la aparición del síndrome de la banda iliotibial. La debilidad en los abductores de la articulación de la cadera, tales como los músculos glúteos medio puede dar lugar a mayores fuerzas en la banda iliotibial y el tensor de fascia lata.
 
  • Los corredores de larga distancia tienden a golpe de talón y una fase de estancia más prominente y extensa en comparación con los velocistas. La banda iliotibial está sometida a mayor tensión durante el primer tercio de la fase de estancia.
 
 ¿Cómo reconocerlo?
 
Si el dolor está muy localizado en la parte externa de la rodilla, extendiéndose bajo el borde inferior de la rotula hasta el mismísimo tendón rotuliano, con el que puede imbricarse, lo que falsea el diagnóstico. Es un dolor que comienza casi al empezar a correr y a los pocos minutos impide seguir. Su intensidad aumenta con las irregularidades del terreno y corriendo cuesta abajo.
 
Cede con el reposo y vuelve con el ejercicio. La mayoría de las veces se siente un “clic” característico que acompaña a la sensación de roce doloroso cuando hacemos zancada, al flexionar y extender la rodilla, por la fricción con la parte prominente del borde del fémur.
 
La queja inicial primaria en pacientes con el síndrome de la banda iliotibial es dolor sordo, difuso sobre el aspecto lateral de la rodilla. Estos pacientes no pueden con frecuencia indicar un área específica de dolor, y tienden a utilizar la palma de la mano para indicar la zona del dolor, sobre toda la parte lateral de la rodilla. Sin embargo, en algunos casos, la presentación de los síntomas es el dolor de cadera en el trocánter mayor.
 
 
 
   Tratamientos médico-deportivos
 
Hay una amplia gama electroterápica para tratar este tipo de afecciones. Desde los clásicos ultrasonidos, hasta el láser o la más novedosa electromagnetoterapia por radiofrecuencia son de gran eficacia para ayudar o auxiliar a la resolución del cuadro, aunque por sí mismos no son determinantes.
 
Son más importantes las maniobras desfibrosantes como el masaje transverso y profundo tipo Cyriax o las más novedosas técnicas de puntos gatillo desfibrosados según Typaldos, con las que conseguimos romper las posibles adherencias que hayan creado las repetidas inflamaciones del tracto iliotibial. Y, muy especialmente recomendada, la técnica de Moneyron, haciendo vibrar el tendón para desadherir y calmar el dolor.
 
Los ejercicios de flexión y extensión potenciadores de pierna, con extensión o moderada flexión serán la norma en cuanto la lesión lo permita. Intentaremos que no duela al hacer los ejercicios, aunque se deben iniciar precozmente. De usar algún tipo de inyección utilizaremos las más superficiales (intradérmicas o subcutáneas) no “infiltratorias” y con un producto lo más natural posible  huyendo de los corticoides. En última instancia, la formación de un importante quiste fibroso o de gran inflamación bajo el tracto iliotibial que no responda a las medidas anteriores hace necesario el desfibrosado quirúrgico.

  Terapia médica
 
Pasa por revisar minuciosamente la biomecánica de carrera, desde el calzado hasta el desarrollo de la zancada. Se impone una buena exploración de las cadenas musculares y articulares del corredor, y se debe reconsiderar la técnica de carrera. Igualmente hay que realizar un buen estudio de la pisada con huella plantar dinámica y usar plantillas antipronación o para excesiva supinación si estuviesen indicadas.
 
Se revisará el terreno por el que corremos, en especial los lados inclinados de carreteras o caminos. Tenemos que evitar las cuestas durante un tiempo prudencial. Y, por último, se realizará la potenciación muscular antes descrita para que el eje cadera-muslo-pierna discurra convenientemente cuando corramos.
 
 
 
Tratamiento
El tratamiento generalmente es conservador y requiere medicación antiinflamatoria, frío local después de la actividad, modificación de la actividad, reposo relativo o disminución de la intensidad del entrenamiento, masaje, estiramientos y potenciación del miembro afectado. La meta es reducir al mínimo la fricción de la banda iliotibial sobre el cóndilo femoral. 
 
La mayoría de los corredores con kilometraje bajo responden a un régimen de tratamiento medico con antiinflamatorios y estiramientos ; sin embargo, los corredores competitivos o del alto-kilometraje pueden necesitar un programa más intensivo de tratamiento.
La meta inicial del tratamiento debe ser aliviar la inflamación usando hielo y medicamentos antiinflamatorios. La educación del paciente y la modificación de la  actividad son cruciales para el tratamiento adecuado. Se prohíbe cualquier actividad que requiera la flexión y la extensión repetidas de la rodilla. Durante el tratamiento, el paciente puede nadar para mantener la aptitud cardiovascular. Si la hinchazón visible o el dolor persisten con la deambulación durante más de tres días después de iniciar el tratamiento, se puede considerar el poner una infiltración con corticoides . 
 
Programa de rehabilitación
Mientras que la inflamación aguda disminuye, el paciente debe comenzar un régimen de estiramientos que se centre en la banda iliotibial así como en los flexores de la cadera y los flexores plantares. Los estiramientos comunes de la banda iliotibial (figuras siguientes) se han demostrado eficaces en la consecución de dicho estiramiento. En un estudio en atletas se ha demostrado su eficacia, pero estos atletas no tenían síndrome de la banda iliotibial.  Aunque este estudio demuestra ser eficaz para estirar la banda iliotibial, los participantes en el estudio no tenían un síndrome de la banda iliotibial.